miércoles, 14 de octubre de 2009

Hay que volar con lo establecido, perdido por el tiempo, podrido por el tiempo.


Hace un mes aproximadamente fuimos con Dany a ver a Los Violadores, era una deuda que teníamos desde hace 27 años. Sí 27 años (perdidos por el tiempo, y podrido por el tiempo) hoy pasamos los 40, pero como dijo mi amigo, los recitales y la cancha es algo que mientras nos dé el cuerpo lo vamos hacer.
Después de reprogramar la fecha por una varicela que mantuvo al líder en cama por dos semanas, llegaba la hora de la banda de punk más emblemática que se formó bajo el sol argento, allá por los principios de la década del ’80.
Una vez intenté verlos en La Capilla (Suipacha al 400) junto con Geniol con Coca, Cadáveres de Niños, Los Laxantes, Comando Suicida y Sentimiento Incontrolable. Una misa Punk que terminó con un camión jaula en la puerta y al grito del hit de Comando Suicida: ‘Yuta, yuta, yuta Hija de Puta’, nos perdimos por la calles del centro y el recital de Los Violadores.
Separaciones, cambios de formación y demás vaivenes de la vida cotidiana no lograron terminar abruptamente esta historia, que el último viernes de agosto se empezó a contar cuando el reloj ya se había pasado media hora de las 22 hs. “Violadores de la ley”, “Viejos patéticos” y “Aunque se resistan” arrancan sin respiro, hasta que aparece el primer saludo de la noche. Es Pil el que habla, único integrante que queda de la formación inicial de Los Violadores, (primera formación: Hari B (guitarra) Sergio Gramática (batería) Stuka (bajo) Pil Trafa (voz) prontos a cumplir 28 años en escena, el mismo que pide con algo de seriedad “escupidas no, por favor”, y ahí nomás se despacha con el superclásico “Contra la pared”.
Continúa con “Más allá del bien y del mal”, en el que, sonriente, ofrece su micrófono al público y les regala el liderazgo por un rato, para retomar el mando con “Holidays in the Sun”, cover de los Sex Pistols. “Espera y verás”, “Somos Latinoamérica” y, con el vaso en alto, “La caída de la luna” se cantan con el puño en alto y la mente en la lucha. “Argentina es un país que está siempre en lucha, esta es una marcha más’”, y así no más arranca con la décima canción.
Como anticipo de lo que se viene, la banda conformada además por El Niño, en el bajo, Tucán en guitarra y Segio Vall en batería, donde Pil aprovecha, como es costumbre, para contar un poco de la historia argentina; en este caso, del partido Justicialista, ese que “multiplica pobres”, según declara mientras canta “operación no me olvides” (tema nuevo).
El mejor momento de la noche estaba por llegar y aún nadie lo sabía. “La banda más rockera de la Argentina”, los presenta la voz principal. Claro, no hacen falta nombres cuando sale a escena Chizzo con su guitarra brillante y su galera negra, para llenar de energía el salón y convertir a Niceto en un laboratorio de rock. La Renga – Los Viola’, Los Viola’ - La Renga. Así suenan “Nada ni nadie nos puede doblegar” y “Whisky in the Jar”, tema que también versionó Metallica y que regala el lucimiento total del cantante de La Renga con las 6 cuerdas y la admiración de los cuatro Violadores, que contemplan boquiabiertos. “Ellos son”, “Bajo un sol feliz” y la frutilla “Represión” (“Fútbol, el asado y el vino”, todavía hoy, 27 años después, siguen siendo, por lo menos para muchos de los argentinos, tres grandes pasiones. Y a su vez, por desgracia, no es lo único que se sigue manteniendo vigente de la letra. “Semanas largas sacrificadas, trabajo duro, muy poca paga”. Con esta frase nos podríamos hacer un verdadero festín. Un denominador común en gran parte de la población. Y pensá que esta escrita en 1983.
Le siguen a aquel enorme clímax, y empiezan a avisar el final. “Bombas a Londres” y la banda se retira. No, no te alarmes. No faltó ese. Vuelve al escenario Chizzo y con las tablas repletas de fans ,músicos, historias y sudor, “Uno, dos, ultraviolento” sale con todo, pogo incluido, mueven sus "scharros" con frenesí (caderas). Así se cierra el oscuro telón. Hora y media, más de 20 temas, y una banda legendaria del punk local. El "dremcom" en la "goloba" nos hace decidir y con Dany, ya sin borcegos y mucho menos sin cresta, saldamos una deuda de 27 años. ¡No Queremos aburrirnos! ¡No, queremos convertirnos! Sólo queremos referirnos a nuestra realidad.


(Por Silvio Botta)

No hay comentarios :