Carta de una mamá de Cromañón

Ariel, tenía 24 años cuando masacraron su futuro lleno de planes, hijo y hermano ejemplar, cariñoso, muy mamero, amigo incondicional (el Ruso) para ellos, trabajador incansable, destacado siempre con sus excelentes notas en sus estudios, desde la primaria, secundaria y terciaria recibido de Visitador Médico, le gustaba mucho que le haga cosquillas en su espalda, que le haga masajes en su cabeza, su desaparición física causó un enorme vacío en la familia, se lo extraña cada día más, alegre y chispeante con una sonrisa siempre en sus labios, haciendo bromas a su hermana, pero muy compañeros también, pasaban mucho tiempo charlando eran buenos compinches el uno del otro, por todo esto y muchísimo más sus papás, hermana, tías, abuelos, amigos y vecinos, nunca lo olvidaremos, su solidaridad y su carisma va ser siempre recordada.

¡HIJO TE QUEREMOS MUCHO Y EXTRAÑAMOS CADA DÍA MAS!

Mamá de Ariel Hernán Malenovsky